Las ADSGs o asociaciones de defensa sanitaria ganadera, como su nombre
indica, son entidades creadas por los propios ganaderos con el fin de mejorar
el estatus sanitario de sus explotaciones mediante la ejecución de un programa
sanitario que busca como fin la prevención y el control de las enfermedades del
ganado vacuno.
Mediante este programa se ha conseguido una mejora de las producciones,
disminución de las pérdidas ocasionadas por motivos sanitarios y con ello una
mayor rentabilidad. En definitiva, tener animales más sanos y controlados para
así obtener un rendimiento máximo y una mejor calidad en su producto, objetivo
que se busca desde que surgió la “Medicina de la Producción”.
Estas entidades tuvieron su origen en torno a 1996 cuando se publica el
primer Real Decreto en España con la regulación y el propósito de la creación
de las ADSGs . En Galicia realmente este movimiento empieza a tener auge entre
2001 y 2002 con la creación de las primeras asociaciones en nuestro territorio.
Desde su creación hasta la actualidad se han conseguido muchos avances en
el control de las enfermedades como: BVD, IBR, Paratuberculosis y Neospora y una
mejora en el control de muchas enfermedades parasitarias. Hasta el día de hoy éste
ha sido el papel fundamental que han tenido las ADSGs en Galicia, pero, ¿qué
pasara en el futuro?. Eso nunca se sabe, pero lo que sí está claro es que aún
hay gran parte del programa sanitario sin desarrollar. Gracias a los logros ya
conseguidos con estas patologías, tendremos más tiempo para desarrollar otras
partes del programa sanitario no implementadas por el momento.
Lo que sí está claro es que la prevención es el futuro y que la
bioseguridad es un campo en el que hay mucho que trabajar y aprender de otras
especies. Tal vez ese sea el futuro más próximo del trabajo en ADSGs aunque eso
sólo lo podrán decidir los que iniciaron este proyecto, esos ganaderos
inquietos que buscaron la mejora de la salud de sus vacas y con ello la
producción de alimentos saludables y sanitariamente más óptimos para el consumo.
Fdo.: un veterinario apasionado de su trabajo.